sábado, 25 de junio de 2022

Titular sin titular: una nueva labor de los periodistas


A los viejos estudiantes de periodismo nos enseñaron una de las reglas básicas del oficio cuando redactábamos una noticia: la de las 5 Ws. Era una forma sencilla de plantearse en la mente el texto que había que escribir y ayudaba a organizar la redacción del mismo. Las W’s son seis: Quién, qué, cuándo, cómo, dónde y por qué, en su traducción castellana.

Con las respuestas a estas preguntas tenías asegurado el titular, la entradilla y los primeros párrafos de una información. El orden dependía de la destreza del reportero. En un asesinato, por ejemplo, habrá que empezar por el quién si el asesinado es un figura pública relevante, o por el cómo si es tremendamente sangriento.

Las 5 Ws también ‘organizan’ la lectura al lector, que se entera enseguida de lo más relevante. Nadie ha dicho que esa regla haya caducado. Y por supuesto que no lo ha hecho. Sin embargo, cada vez tiene menos importancia en las informaciones de las páginas webs de los medios. ¿Por qué?

En una edición impresa, el lector ya ha hecho el desembolso al comprar el ejemplar. Por tanto, se le ofrecen todas las claves de la información cuanto antes. En las ediciones digitales, en cambio, el lector que no aporta al medio -el que se queda en el escaparate de la tienda y no entra- sólo tiene el titular y una pequeña entradilla -a los que accede de forma gratuita- y necesita ‘pinchar’ en ellos para profundizar.

Pues bien, sea una noticia en abierto -para conseguir más pinchazos- o cerrada -cuando el objetivo es la suscripción- internet está modificando la forma de titular. Las 5 Ws están pasando a mejor vida en las webs informativas y los titulares y entradillas de las informaciones ya no están proporcionar las claves de la noticia al lector, sino picar su curiosidad para que ‘entre’ en ella, añadiendo un clic más al tráfico o -ojalá- sumando una suscripción más al periódico.

En otras palabras, este nuevo periodismo coloca otra labor a los periodistas: no sólo buscar, redactar y titular las noticias, sino conseguir que se lean, o lo que es lo mismo, que consigan clics -lectores- y ‘conversiones’ -suscriptores-.

Algunos ejemplos de titulares que no titulan y cuyo objetivo es que el lector le dé otra vez al dedo en el móvil o la tablet o al ratón del ordenador para abrir la noticia y conseguir un nuevo clic:

-El intrigante comunicado que está disparando el precio del bitcoin

-Las claves de la escalada del precio de la luz

-Tres argumentos para el rebote de la bolsa

-A quién escucha Vladimir Putin

-Las tres razones que empujan a Rusia hacia el default

-Què pasa si Rusia corta repentinamente el suministro de gas a Europa

-La inesperada decisión de Netflix

-Así es la estrategia de Carlos Slim para conquistar el inmobiliario español

-Qué ha pasado en las últimas horas de la invasión

-Dos valores que lucen en la guerra y pueden escalar un 35%

-¿Por qué Sagunto es la elegida por Volkswagen para instalar su gigafactoría en España?

-¿Por qué la tasa de inflación de España duplica la de Portugal? (EC)

-Todo lo que se puede contar sobre el amigo entrañable del rey de Marruecos

-Las tres últimas apuestas en Bolsa de Soros para ganar hasta el 110%

Y uno flagrante, con implicaciones incluso en la salud:

-Sanidad retira dos populares medicamentos para adultos y niños. Se trata de un antibiótico común y un fármaco para la hipertensión.

martes, 14 de junio de 2022

Actualidad Económica, crónica de una historia de éxito







El número 1.494 de Actualidad Económica salió a la calle el 26 de febrero de 1987. La revista estaba en la mitad de su historia. José María García-Hoz, entonces director, se hacía eco en su artículo semanal -era como el editorial de la revista- de la pugna entablada entre el secretario de Estado de Economía, Guillermo de la Dehesa, y el ministro de Industria, Luis Carlos Croissier, sobre la necesidad de una segunda reconversión industrial en España. La primera, auspiciada por Carlos Solchaga unos años antes, había dejado muchas heridas económicas y sociales en el país. 

En ese número se entrevistaba a Manuel Luque, director general del fabricante de detergentes Camp y el primer directivo que salió en una campaña de publicidad en televisión. Aquel "busque, compare y si encuentra algo mejor, cómprelo" que recordarán los más viejos del lugar. Y también en ese número, la revista daba la exclusiva de la salida a cotizar de Telefónica en la Bolsa de Nueva York. Esa semana empecé a escribir en la Económica.

Actualidad Económica ha plasmado la crónica de la vida empresarial, financiera y social de España desde finales de los años 50. Nació con el Plan de Estabilización de Mariano Navarro Rubio y llega a su número 3.000 inmersa en la digitalización y todo lo que ese proceso tecnológico influye en el mundo. En el trabajo -teletrabajo, reducción de horas laborales-, en los procesos productivos, en las relaciones comerciales y financieras -globalización, desintermediación, 'fintech', criptomonedas-.

La crónica de estas décadas es una historia de éxito. En 1958, España era una dictadura que luchaba aislada del mundo por la supervivencia económica. Hoy esa una democracia plenamente asentada y se cuenta entre las principales economías del mundo. En apenas una generación, la sociedad española se ha equiparado en derechos y libertades a las del mundo desarrollado. Evidentemente, el país tiene problemas que solucionar. 

Hay grandes asuntos estructurales, como la educación, el modelo de estado, la libertad económica, la reforma de instituciones como la Justicia o la reducción del poder de los partidos políticos en la sociedad, que es necesario reformar. Por el bien de todos, esperemos que se den pasos para ello. España es una historia de éxito, a pesar de los pesares. Actualidad Económica también.