domingo, 14 de septiembre de 2014

Formar para buscar empleo

SI HAY algo desasosegante al analizar estadísticas comparativas entre los países desarrollados es el ámbito educativo. En ninguna de ellas España sale bien parada. Lo vemos otra vez al leer en el informe Panorama de la Educación 2014 de la OCDE. Por ejemplo, un dato en el que salimos mal parados: la tasa de paro de los españoles con estudios superiores triplica la media de los países que integran esa Organización: si en la OCDE sólo un 5% de los licenciados y de los que han estudiado Formación Profesional de 3º grado está en paro, en España esa cifra sube al 14%.

Este periódico abría su edición de ayer con otro dato inquietante: «La mitad de los desempleados dejó de estudiar a los 14 años». Es decir, casi tres millones de españoles que no tienen trabajo apenas tienen posibilidades de encontrar un empleo cualificado. Por lo tanto, en condiciones más aceptables de sueldo y contratación que un trabajo temporal en verano, que son puestos de trabajo muy interesantes -y necesarios por la constitución de nuestro tejido productivo- cuando empiezas una vida profesional, pero que condicionan notablemente el desarrollo profesional y social si el trabajador no tiene posibilidades de salir de ahí porque le falta formación.

Sistema educativo y mercado laboral están íntimamente conectados. Casi no hace falta decirlo, porque no hay más que ver el nivel de paro en los países con las mejores clasificaciones de PISA. Y si el mercado de trabajo es competitivo, en cierto modo también tiene que serlo el sistema educativo de un país.

No hace falta decir que todos tenemos derecho a la educación. Ni que la falta de recursos familiares no debe impedir que nadie se quede sin estudiar y llegar hasta la etapa de ciclo de enseñanza que desee. Pero eso no está reñido con la exigencia personal al alumno, con la rendición de cuentas de los docentes, con la autonomía real de los directores, con el reparto de recursos según objetivos, con la apertura de los procesos de selección del profesorado...Si mejora el nivel formativo del país, lo hará el empleo.

¿Nunca se han preguntado por qué hay tres escuelas de negocios privadas españolas entre las diez mejores del mundo -pegándose con Harvard, el MIT o la London School of Economics, por ejemplo- y no hay ninguna universidad pública entre las doscientas mejores del planeta? Que responda el PSOE, que ha promulgado todas las leyes educativas de la democracia.

@vicentelozano

(Publicado en El Mundo el 10 de septiembre de 2014)

sábado, 13 de septiembre de 2014

Tres meses con Podemos


HACE hoy tres meses que se celebraron las elecciones europeas. O lo que es lo mismo, 90 días de la irrupción de un movimiento -todavía no es un partido al uso- sobre el que ha pilotado la política nacional desde entonces, si dejamos de lado la cuestión catalana. Los cinco eurodiputados que consiguió Podemos se han convertido en el vector-fuerza del debate social, como han demostrado los acontecimientos.

Al PP le ha afectado de tal forma que Rajoy parece dispuesto a sacar adelante en solitario una reforma electoral -nada menos que toda una reforma electoral- para asegurarse un número importante de alcaldes en las municipales de mayo. El PSOE se debate entre la radicalización de su discurso para evitar la fuga de electores por su izquierda. IU se encuentra noqueada después de ver cómo una formación con un planteamiento más radical que el suyo le golea ante su electorado natural. La revolución ha llegado incluso a UPyD, como demuestra el artículo de Sosa Wagner publicado en EL MUNDO la semana pasada. El eurodiputado pedía una coalición con Ciudadanos para afrontar con más garantía el ocaso del bipartidismo.

Podemos es el enemigo a batir. Hasta el punto de que la escuela de verano del PP fue todo un curso de invectivas contra el movimiento liderado por Pablo Iglesias para intentar frenar su creciente influencia social. Pero a Podemos no le da votos su doctrina económica imposible. Ni su cercanía a las tesis filoetarras -tampoco se los quita cuando el terrorismo ha desaparecido de las preocupaciones de los españoles-; a Podemos tampoco le da votos su defensa del chavismo o del castrismo. A Podemos le llueven las simpatías no por lo que ellos dicen sino por lo que los demás no hacen: regenerar de verdad la vida política.

Por ejemplo, también hoy se cumple un mes de la confesión de Jordi Pujol y ni la Generalitat y CiU, a quienes el ex molt honorable dejó con el trasero al aire, han movido un dedo para exigir responsabilidades penales. Poco va a esclarecer su comparecencia en el Parlament. Por ejemplo, los dos últimos presidentes andaluces están imputados en un proceso de corrupción y la Junta y el PSOE siguen defendiéndolos. Por ejemplo, el PP continúa enrocado con sus ministros gurtelianos, arrastra el caso Bárcenas y mantiene a imputados que se resisten a dejar sus cargos sin que el partido parezca darse por enterado. El mejor antiPodemos es una autolimpieza de lo que llaman casta.

@vicentelozano

(Publicado en El Mundo el 25 de agosto de 2014)