lunes, 7 de diciembre de 2020

Europa no tiene GAFAs

En este mundo del siglo XXI, los grandes vencedores desde el punto de vista empresarial son las grandes empresas tecnológicas, encarnadas en lo que se conoce con el acrónimo GAFA (Google, Amazon, Facebook y Apple), felizmente puesto por los analistas de un banco de inversión, creo que fue Morgan Stanley, en el inicio de la década pasada. Después se añadieron otras, como Microsoft (GAFAM) y Netflix (FANGAM). Todas se sitúan ahora entre las que tienen más valor bursátil del mundo, fundamentalmente porque sus fundadores y gestores han sabido adelantarse a lo que iban a necesitar los ciudadanos. Ahí radica exclusivamente su éxito, al margen de que hayan bordeado o no la ley para acaparar mercado. Y todas tienen otra cosa en común: son estadounidenses.

Pero hay otras GAFA, menos conocidas. China tiene su Google, que se llama Baidu. China tiene su Amazon, el gigante Alibaba, China cuenta con su Facebook, WeChat, la red social propiedad del gigante Tencent. Y China tiene sus Apple, como Huawei o Xiaomi. Todas son empresas de éxito, que cotizan en Bolsa con buenos resultados y con capitalizaciones importantes. Tencent y Alibaba, por ejemplo, valen más de 500.000 millones de dólares -5.000 zendales que diría Ayuso-: similar a lo que capitalizan las 35 empresas del español Ibex.

Lo malo para nosotros es que Europa no tiene un Amazon ni un Alibaba, un Google ni un Baidu, un Facebook ni un WeChat. Y esto es grave porque si los europeos no hemos sabido o no hemos podido posicionarnos en los sectores punteros de la economía actual nos arriesgamos a perder influencia en el planeta. Es cierto que ahora el mundo está globalizado y estas grandes multinacionales operan y generan empleo y riqueza allí donde están, pero qué duda cabe que la nacionalidad cuenta mucho a la hora de tomar decisiones. Véase los litigios que tienen casi todas con el pago de impuestos en la Unión Europea, algo que no se produciría si Facebook o Google fueran de capital europeo.

La OCDE acaba de publicar sus estimaciones de crecimiento económico para los países que forman parte de la organización. Sólo hay uno que va a terminar este año en positivo: China, cuyo PIB avanzará un 1,78%. Estados Unidos ocupa la décima posición en la clasificación, con una caída del 3,7%. En el otro lado, de los diez países que se van a ver afectados por la pandemia, siete son europeos: Austria, Portugal, Italia, Francia, Grecia, Reino Unido y España. Todos con descensos del PIB entre el 8% del país alpìno, y el 11,6% del nuestro.

Evidentemente, hay muchas razones que explican las diferencias de crecimiento entre países y zonas geográficas, pero da que pensar que entre las economías que mejor se comportan en estos momentos de grave crisis son las más dinámicas en los sectores tecnológicos --incluso en países sin libertad política- mientras que los rezagados en este campo sufren mucho más y pierden riqueza y empleo. El hecho es que Europa va a salir de la pandemia mucho más retrasada respecto a los dos gigantes.