jueves, 21 de marzo de 2013

Montoro, ese ministro



El ministro está crecido por lo bien que la ha salido la cuadratura de las cuentas públicas de 2012. Aunque habrá que esperar al dictamen definitivo de Bruselas el mes próximo, es cierto que lo logrado por el Gobierno, décima de PIB arriba o abajo, es muy meritorio.

Pero de ahí a elevarse sobre un pedestal va un salto que Montoro no debería dar. Porque un ministro no puede utilizar argumentos 'ad hominem' en el debate parlamentario. No debe responder a un senador socialista que "cuando tenga en su currículum haber contribuido a que España fundara el euro quizá podremos hablar de tú a tú". No puede hacerlo ni aunque ese senador sea Tomás Gómez y le haya llamado "trilero de la política".

Y no puede hacerlo porque nadie está exento de errores graves en su acción política. Como el de ayer, al anunciar en pleno desconcierto sobre la requisa de los depósitos chipriotas que el Gobierno va a aplicar una tasa a los españoles. Es decir, va a elevar del 0% actual hasta un "tipo moderado" el impuesto a los depósitos que cargaban a los bancos algunas autonomías y que el Gobierno legisló para todo el Estado con el fin de quitárselo a las CCAA.

Montoro se ha tenido que dedicar en las últimas horas a explicar allá donde ha hablado que lo nuestro no tiene nada que ver con Chipre. Tiene toda la razón, pero al español que tenía la mosca tras la oreja y ya había preguntado a su banco sobre la posibilidad de sacar sus cuentas a una sucursal fuera de España el conocimiento del "impuesto a los depósitos" en España no le habrá sonado muy distinto del "impuesto a los depositantes" de Chipre.

Aunque el ministro de jacte de haber "contribuido a que España fundara el euro" también ha recibido muchas críticas por sus campañas recaudatorias 'in situ', cuyo último exponente ha sido la irrupción de inspectores en Valencia, en plena 'plantá', para exigir facturas del último clavo gastado en una falla.

No hace falta, repito, opositar a ser el más malo del lugar, aunque te guste serlo. Pero si lo haces, tienes que atenerte a las consecuencias si por el camino has provocado demasiadas heridas. Imaginemos, sólo imaginemos, que la Comisión Europea le dice algo sobre la forma de reducir nuestro déficit público el año pasado.

@vicentelozano